SEGÚN SU GRUPO SANGUÍNEO

El grupo sanguíneo es la llave que abre la puerta a los misterios de la salud, la enfermedad, la longevidad, la vitalidad física y la fuerza emocional. Su tipo de sangre determina su susceptibilidad a la enfermedad, los alimentos que usted debería comer, y cómo debería practicar ejercicio. Es un factor clave en sus niveles de energía, en la eficiencia con que usted “quema” las calorías, en su respuesta emocional al estrés y quizás incluso en su personalidad.

La conexión entre grupo sanguíneo y dieta puede parecer radical, pero no lo es.

Tenía que haber una explicación sobre por qué algunas personas son capaces de perder peso con algunas dietas especiales, mientras otras no lo son; por qué algunas persona conservan la vitalidad en una etapa avanzada de la vida, mientras otras se deterioran mental y físicamente.

Los grupos sanguíneos son tan fundamentales como la creación misma. En la lógica magistral de la naturaleza, los tipos de sangre siguen pautas inviolables desde los primeros tiempos de la creación humana hasta el presente. La sangre es la fuente principal de nutrición del organismo. Si ampliamos los recientes hallazgos sobre el ADN humano, esta idea sobre el grupo sanguíneo constituye un paso adelante en la ciencia de la genética al establecer de manera inequívoca que todo ser humano es completamente único.

No hay una dieta o estilo de vida correcto o incorrecto; sólo hay opciones correctas o incorrectas que se deben basar en nuestros códigos genéticos individuales.

Las personas pertenecientes al grupo sanguíneo “A” responden deficientemente a las dietas de altas proteínas que incluyen porciones generosas de carne, pero responden muy bien a las proteínas vegetales. Los productos lácteos suelen producir abundantes cantidades de mucus en los senos nasales y las vías respiratorias de estas personas. Asimismo cuando incrementaban sus niveles de ejercicio y actividad física, por lo general experimentan fatiga y malestar; en cambio, cuando realizan formas de ejercicio más leves, como el yoga, se sienten animados y dinámicos.

Por otro lado, las persona del grupo “0” prosperan con las dietas ricas en proteínas y las actividades físicas intensas, como el trote y el aerobismo, los fortalecen. “Lo que es alimento para un hombre, es veneno para otro”.

Las principales afecciones del estómago están relacionadas con el tipo de sangre. La primera es la úlcera péptica, una enfermedad a menudo asociada con niveles de ácidos gástricos más alto que los normales.

Esta enfermedad se considera más frecuente en personas del grupo “0” que en individuos de otros grupos sanguíneos. Es extraño ya que las personas del grupo “0” responden bien a los productos animales y a las dietas-alimentos ricos en proteínas que requieren más ácido gástrico para una digestión apropiada.

A la vez el cáncer de estómago está asociado a las personas del grupo “A”. Este cáncer a menudo está asociado a bajos niveles de producción de ácido gástrico, como la anemia perniciosa, otra enfermedad más frecuente en los individuos del grupo “A”. Esta anemia está relacionada con una carencia de vitamina B-12, que requiere suficiente ácido gástrico para su absorción.

El tipo de sangre”0” predispone a las personas a una enfermedad asociada con una producción excesiva de ácido gástrico mientras que, por otro lado, el tipo de sangre “A” predispone a las personas a dos enfermedades asociadas con una escasa producción de ácido gástrico.

Las lectinas: la conexión con la dieta

Se produce una reacción química entre su sangre y los alimentos que usted come. Sabemos que esto se debe a un factor conocido como lectinas, son proteínas abundantes y diversas que se encuentran en los alimentos, y tienen propiedades aglutinantes que afectan su sangre.

La mayoría de las lectinas que se encuentran en la dieta humana no son tan peligrosas para la salud, si bien pueden causar una serie de trastornos, especialmente si son específicas para un tipo de sangre en particular.

Por lo general, nuestros sistemas inmunes nos protegen de las lectinas. El 95% de las lectinas que absorbemos de nuestra dieta típica son desechadas por el organismo, pero al menos un 5% de ellas se infiltran en el torrente sanguíneo.

La acción de la lectinas en el tubo digestivo puede ser aún más poderosa. A menudo crean una aguda inflamación de la mucosa sensible de los intestinos, y su acción aglutinante puede parecer una alergia a los alimentos. Incluso un cantidad diminuta de lectina es capaz de aglutinar un gran número de células si ese particular tipo de sangre es opuesto o reactivo.

La clave es evitar las lectinas que aglutinan sus células en particular, lo cual está determinado por su tipo de sangre.

• Su tipo de sangre – 0 – A – B – AB – es una “huella digital” genética que lo identifica tan claramente como su ADN.

• Si usted utiliza las características individualizadas de su tipo de sangre como orientación para comer y vivir, será más saludable, alcanzará naturalmente su peso ideal y detendrá el proceso del envejecimiento.

• Su tipo de sangre es una medida de su identidad más confiable que la raza, la cultura o la geografía. Es una característica genética que lo identifica, una guía sobre cómo vivir más saludablemente.

• La clave de la importancia del tipo de sangre se puede encontrar en la historia de la evolución humana.

• Al aprender los principios del análisis del tipo de sangre, podrá adaptar la dieta óptima para usted y los miembros de su familia. Podrá identificar los alimentos que le hacen mal, que contribuyen al aumento de peso y que ocasionan enfermedades crónicas.